En algún momento te has planteado mejorar tu peso o cambiar tu alimentación por salud, y es cuando decides hacer una dieta de restricción  super estricta o quitarte todo aquello que consideras perjudicial para ti, hacer ejercicio a diario y en menos de un mes ya vuelves a tus hábitos e incluso te sorprendes dándote algún atracón.

La cuestión es hacer un habito que te permita flexibilidad en momentos puntuales y puedas volver a retomar sin dificultad, pero para eso lo primero es comenzar a adquirir buenos hábitos.

 Establece objetivos de nutrición realistas y alcanzables ya que es parte importante para lograr un estilo de vida saludable a largo plazo. Aquí tienes algunos pasos que te pueden ayudar establecer metas nutricionales y desarrollar un plan sostenible:

  1. Evalúa tu estado actual: Estas preguntas te ayudarán a identificar donde te encuentras ¿Cuáles son mis hábitos alimentarios actuales? ¿Cómo es mi nivel de actividad física?¿Cuál es mi peso actual? ¿Tengo alguna condición médica relevante? ¿Tienes suficiente energía? ¿Te sientes cansado o con falta de energía con frecuencia? ¿Experimentas cambios de humor o dificultades para concentrarte? ¿Quieres perder peso, ganar masa muscular, mejorar tu salud en general o manejar una condición específica? Comprender tus objetivos y motivaciones te ayudará a establecer metas más claras y significativas.
  2. Establece metas específicas: Establecer metas claras y medibles te permitirá tener un enfoque más concreto.                         Identifica áreas de mejora, Prioriza tus necesidades, Establece metas medible, Considera el tiempo y la factibilidad 
  3. Sé realista: Es importante establecer metas que sean realistas y alcanzables para ti.                                                                          Considera tu situación actual ,Establece un ritmo adecuado, Examina tus recursos, Sé honesto contigo mismo
  4. Haz un plan de acción: Desarrolla un plan concreto que te ayude a alcanzar tus metas, planificación de comidas, la compra de alimentos saludables, la preparación de comidas en casa y la organización de tus horarios para hacer ejercicio. Establece un plan que se adapte a tu estilo de vida y que te resulte factible.
  5. Establece hitos y seguimiento: Divide tu objetivo a largo plazo en hitos más pequeños y establece un seguimiento regular para evaluar tu progreso. Esto te ayudará a mantenerte motivado y te permitirá realizar ajustes si es necesario. Puedes utilizar herramientas como un diario de alimentos o aplicaciones móviles de seguimiento de la dieta para ayudarte a mantener un registro de tus hábitos alimentarios y de ejercicio.
  6. Busca apoyo: No tengas miedo de buscar apoyo en tu viaje hacia una nutrición saludable. Puedes hablar con profesionales para obtener orientación personalizada. También puedes considerar unirte a grupos de apoyo en línea o en tu comunidad local para compartir experiencias y recibir motivación adicional.